El precio del pollo cayó alrededor del 35% en los últimos 20 días, por lo que se espera que la caída se traslade a la venta al público. En este sentido, el sector empresario asegura que el kilo de la carne se vendería a $650 promedio, un valor que beneficiará a los consumidores ya que anteriormente el costo rondaba los $900.
Según Roberto Domenech, presidente del Centro de Empresas Procesadoras Avícolas (CEPA), el precio se estabilizó luego del aumento que hubo por los efectos de las altas temperaturas y de las malas condiciones climáticas.
"Fueron 40 días que hubo que poner a dieta a los pollos porque con el calor corríamos el riesgo de que se murieran todos si comían a discreción. Esto hizo que, cuando este tenía que pesar aproximadamente tres kilos, terminó pensando 2 kilos o 2,400 kilos. Ahí se produjo un faltante muy grande y aumentó el precio", expresó.
Por su parte, el precio en marzo de este año alcanzó entre $700 y $2000, según el corte que se lleve el público.