La vuelta de Juan Sebastián Verón a Estudiantes, como futbolista primero y dirigente luego, generó una revolución inigualable y marcó un quiebre en la historia reciente del club. Es que desde la función que sea, no puede pasarse por alto que las diferencias entre el antes y el después fueron notorias, y la institución tuvo desde entonces un crecimiento impresionante: títulos, ventas millonarias, superávit, la reinauguración de UNO, el regreso al plano internacional, entre otros aspectos. Y para que todo esto se produzca, hubo un hecho inicial determinante y la propia "Brujita" se encargó de recordarlo.
Un 5 de junio de 2006 cambió para siempre la historia reciente del "Pincha". Con 31 años recién cumplidos, el hoy vicepresidente cumplió lo que había prometido tiempo atrás y demostró con hechos lo que no todos pueden garantizar desde que lo anuncian. Compitió al más alto nivel y potenció a sus compañeros durante 6 años, logrando el Torneo Apertura 2006, la Copa Libertadores 2009 y el Apertura 2010. Entre medio, fue subcampeón de la Copa Sudamericana en 2008 y puso en jaque a uno de los mejores equipos de todos los tiempos, cuando fue subcampeón del Barcelona en el Mundial de Clubes.
"Cada uno tiene la posibilidad de escribir en nuestras vidas momentos en donde los riesgos son varios. Los asumís sabiendo que las consecuencias muchas veces no son las que queremos, y así y todo vas siempre para adelante sin pensar o medir que pasará. Los mediocres no recorren sino los caminos conocidos, les gusta andar sobre las cosas hechas y nunca quieren comprometerse, son cobardes. No se juegan ni por una causa ni por nadie. Hay que jugársela, asumir riesgos y tener la voluntad de seguir", dijo, sobre este nuevo aniversario de su regreso, y a modo de balance, en una publicación que compartió en su cuenta de Instagram.
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Posteriormente, metiéndose más en su rol actual de dirigente y en las críticas con las que convive por sus decisiones, agregó que "también hay que saber que los procesos tienen su tiempo, y más cuando empezás a percibir que hay poca tolerancia y falta de respeto" como "en este tiempo que pasó últimamente". Y tras reconocer que esas ambivalencias son parte de esto, concluyó: "veremos qué pasa en el futuro. Para todos es importante tener proyecto, ambición y tolerancia. Gracias a todos por los mensajes de recuerdo de esta fecha. El camino fue hermoso, pero a la vez de mucha responsabilidad. Esperemos que el club siga así, creciendo siempre".
