Miguel Ángel Villalba Pintos, alias “Tiro Loco”, de 40 años, murió ayer lunes por la noche, acribillado por la Policía Bonaerense.
La fuerza provincial sabía de su fama y despachó un equipo conformado por personal del GAD y la Comisaría N°14 para arrestarlo en su rancho de Melchor Romero por un hecho ocurrido 11 días atrás, cuando supuestamente, le disparó a un chico de 16 años junto a dos cómplices tras una pelea en un partido de fútbol. La primera bala que impactó rozó al chico. La segunda le atravesó la mano izquierda.
Ya en el hospital, la víctima pudo señalar a sus agresores. Entonces, fueron por Villalba Pintos. El delincuente salió armado al ver los estrobos de los patrulleros, una pistola en cada mano, una Glock y una Bersa, ambas calibre 9 milímetros. Un sargento que iba tras él recibió un tiro en la mano derecha. La bala también lo atravesó.
Entonces, el fuego aumentó. “Tiro Loco” murió con sus pistolas. La casa del hampón fue allanada, se encontró un chaleco antibalas y una considerable cantidad de dinero, además de balas y un poco de droga.
Su ficha de antecedentes penales cuenta una larga historia de violencia. Para empezar, estaba buscado por homicidio desde diciembre de 2022, un pedido de captura a cargo del Juzgado de Ejecución Penal N°1 platense. También lo buscaba el Juzgado de Garantías N°1, por un caso de lesiones leves y abuso de armas que databa de enero de este año.
Villalba se había visto involucrado en un asesinato tumbero en la Unidad N°9, la cárcel platense, un caso que tramitó en el Juzgado de Garantías N°2. En otra ocasión, lo allanaron n su casa por el delito de robo calificado. En ese momento, estaba bajo prisión domiciliaria.
Se cree que “Tiro Loco” se refugiaba en el lugar con sus dos cómplices en el ataque al chico de 16 años, que fueron identificados con nombre y apellido y permanecen prófugos.
