Durante el comienzo del invierno los casos de influenza, denominados comúnmente como “gripe”, comenzaron a aumentar significativamente en el país, registrándose una suba desde el mes de abril.
El último Boletín Epidemiológico del Ministerio de Salud de la Nación, arrojó datos alarmantes: entre enero y junio se reportaron 402.061 casos de gripe en la Argentina, lo que representa 860,1 por cada 100 mil habitantes.
Además informaron, que ya se registraron 11 muertes. Recordemos, que el año pasado, que fue el que registró más casos desde 2014 hasta ahora, se reportaron 143 fallecimientos por la gripe en total.
Respecto a esta situación, al igual que en el caso del coronavirus, la recomendación de los especialistas sigue siendo la misma, que los grupos de riesgo se apliquen la vacuna correspondiente.
Es decir, que todos los adultos mayores de 65 años, personas gestantes, con enfermedades crónicas (diabéticos, cardíacos y pulmonares) y con alteraciones de la inmunidad, niños o adolescentes que mantienen una terapia prolongada con ácido acetilsalicílico (aspirina), y personal médico, enfermeros y aquellos que tengan contacto con pacientes de alto riesgo, deberán aplicarse la vacuna.
Este año, la vacunación contra la gripe no superó el 80% de la población de riesgo.
En Argentina la inmunización antigripal es gratuita para los grupos de riesgo priorizados y forma parte del Calendario Nacional de Vacunación, sin embargo por distintos motivos, muchas personas no reciben las dosis que necesitan para estar protegidos.
