Thiago, el joven oriundo de González Catán dejó su trabajo en el Mercado Central y abrió su verdulería, lo que le permitió juntar dinero para financiar las reparaciones de su casa.
El paso por Gran Hermano marcó sin dudas un antes y un después en la vida de Thiago Medina.
El joven 19 años que rápidamente se ganó el cariño de la gente por su humildad, está lejos de atravesar la mediatización que hoy tienen sus ex compañeros. Habiendo bajado un poco su perfil en los medios, decidió volver a su González Catán natal para ocuparse de su familia y cumplir una de sus grandes metas: reparar su casa.
Tanto en las entrevistas virtuales que dio luego de salir del reality, como en distintas publicaciones en sus redes sociales, fue mostrando algunas imágenes de la vivienda que le provoca tanto orgullo.
Lo que hace unos meses eran paredes con manchas de humedad y sin revocar se convirtieron en muros de tonos claros, con grandes ventanas que permiten el ingreso de la luz externa.
La casa de Thiago Medina tiene dos pisos y en la parte superior cuenta con un balcón desde donde él y su familia pueden disfrutar de la vista hacia la calle.
El interior ya está decorado con algunos muebles, mientras que en la cocina hay una mesa central, una heladera, un horno y un lavarropas.
“Es otra cosa ahora. Cuando vine por primera vez no reconocía nada”, contó el joven durante una entrevista.
Durante su paso por Gran Hermano, Thiago contó su dura historia de vida y reveló que su sueño era ser dueño de su propio negocio cuando estuviera fuera. Finalmente a comienzos de abril logró su objetivo y lo celebró con mucho orgullo. “Me lo propuse y lo pude cumplir”, declaró en “A la Barbarossa”.