Más allá de la derrota en la interna con Julio Garro, Juan Pablo Allan parece haber sembrado la semilla de una construcción bastante potente en La Plata.
Su campaña había arrancado de manera muy austera y con escasos dirigentes de peso. Sin embargo, con el correr de los días, el actual senador bonaerense fue engrosando sus filas con actores internos del PRO y otros que venían por fuera.
Dentro de la dirigencia del PRO, no es menor el apoyo de Fernando Ponce, ex Presidente del Concejo Deliberante y hombre emblemático del partido amarillo en La Plata. Fue el capo de la Juventud PRO en sus inicios y hoy aglutina a muchos jóvenes militantes, con peso fundamentalmente en el Casco Urbano.
Otras dos figuras externas que sumó Allan a su armado fueron Gerardo Jazmín, de Vecinalistas, y el ex fiscal Marcelo Romero. Jazmín, ex concejal, fue el Jefe de Campaña y tiene un gran despliegue territorial.
En línea con el perfil de Patricia Bullrich, Allan construyó un equipo potente en materia de Seguridad. Al mencionado Marcelo Romero se puede sumar a Juan Beluardo, abogado y Licenciado en Seguridad Pública.
"Armó un equipo de trabajo pujante e inclusivo. Contagió entusiasmo y adjudicó responsabilidades, sin egoísmos. Ejerce el liderazgo promoviendo e inspirando a nuevos líderes", había dicho Romero sobre Allan hace una semana.
Otra demostración de poder de Allan fue su desembarco en el Concejo Deliberante. Actualmente, tres concejalas responden a él: Carla Fernández, Belén Muñoz y Romina Cayón. Ésta última, de hecho, encabezó su nómina en las PASO y tendrá la chance de renovar por cuatro años más.
Por lo pronto, el desafío de Allan será acentuar su construcción y que esos 55 mil votos sean una plataforma para el futuro.
