
Luego de fracasar en el intento de derogar la normativa vigente, Juntos por el Cambio logró al menos una reforma de la Ley de Alquileres, que apunta a que el plazo de duración de los contratos vuelva a ser de dos años y la actualización de los precios sea cada cuatro meses.

Con 125 votos a favor, 112 en contra y tres abstenciones, la principal coalición opositora consiguió la esperada media sanción con el apoyo de los diputados de Córdoba Federal, del interbloque Provincias Unidas y del bloque SER.
La ley número 27.551 entró en vigencia en julio de 2020, y desde allí generó mucha controversia entre quienes son inquilinos y quienes son propietarios.
Los cambios a continuación:
- Los contratos volverán a tener un plazo mínimo de dos años.
- Con respecto a los aumentos, se establecerá un “acuerdo entre partes”. A partir de ahora, no estarán sujetos al índice inflacionario. Las actualizaciones se darán en intervalos de tres a doce meses.
- No se le exigirá más al inquilino el pago de meses por adelantado ni depósitos de garantía superiores a un mes.
- Con respecto a las reparaciones, el dueño se deberá hacer cargo de las urgentes en no más de 24 horas, y las no urgentes en un plazo de diez días desde la notificación.
- La cancelación del contrato se puede realizar antes del vencimiento, siempre y cuando se hayan superado los primeros seis meses. Con la notificación previa de tres meses, no se deberá pagar ningún extra.