Marianela es de La Plata y junto a varias familiares se embarcaron en un sueño que parecía imposible. Hoy son las reinas del 3D. Sus maridos se reconvirtieron y laburan para ellas.
Todo empezó en el contexto de pandemia. Marianela cuenta a LAPLATA1.com que llevaba más de 10 años trabajando en un hospital de La Plata.
“No podía dormir ya que trabajaba en Salud. Fue terrible. Llegaba a casa, me sacaba la ropa en el garage y volaba a bañarme, aterrada de darle un beso a mis hijos, aterrada de traerles ese virus a casa. Pero afortunadamente ninguno se enfermó”, recuerda.
En ese momento de máximo estrés, Marianela empezó a incursionar en el mundo 3D. Siempre tuvo amor por la decoración. Ese fue el puente.
“Yo tenía trabajo pero parte de mi familia se habían quedado sin laburo. Así que arranque yo y las metí en este loquero”, dice entre risas.
“Viciamos inversiones, cursos, muchas horas de práctica, de ver videos. Los comienzos fueron difíciles. Somos personas mayores de 40 años. Imagínate: nada de computación, menos de diseño y ni hablar de programación. Para mí fue un hobbie al principio, pero hoy es nuestro mayor ingreso económico”, señala.
Tras 15 años trabajando en el hospital, Marianela renunció. No podía hacer todo. Su cabeza le iba a explotar, y el asunto del 3D caminaba mejor de lo previsto.
“Laburamos sin parar y muchas veces sin dormir. Conseguir gente que te ayude está complicado. Es meter gente en tu casa, así que hacemos todo en familia. Hay días que decimos que no es vida. Nos costó mucho llegar a donde estamos. Y nos va cada día mejor”, reflexiona la platense.
Un detalle que resalta Marianela: cuando comenzaron, cada vez que se rompía alguna de las máquinas debían enviarlas a Santa Fe para su reparación. Era un trauma. Todo quedaba frenado. Y, encima, no siempre se solucionaba el problema de la mejor manera.
¿La solución? Sus propios maridos se capacitaron para arreglarlas y repararlas. Solo lo hacen para ellas. Unos capos. Sus hijos, por su parte, se encargan de los envíos. Todo queda en familia.
¿Qué hacen? Decoración de bares, locales y eventos; máscaras para animación de fiestas; macetas; esculturas como Chucky, Godzilla o Freddy; lámparas, etc.
Indirectamente, Marianela sigue relacionada al mundo de la Salud: “Trabajamos muchísimo para ese sector. Por ejemplo, el kit de pelvis para obstetricia”.
Y completa: “Antes la gente tenía que comprar huesos en el mercado negro del cementerio y ahora se los hacemos nosotros”.
