Efectivos de la comisaría decima de Quilmes hallaron a Carlos Rubén Montaña fallecido como consecuencia de haber sufrido varios golpes en la cabeza con un elemento contundente.
A partir de las tareas investigativas, se estableció como principal sospechosa del crimen a la hija de la víctima, identificada como María del Carmen Montaña, de 30 años, por lo que fue detenida y trasladada a una dependencia policial de la jurisdicción.
Un dato clave fue aportado por los vecinos del hombre asesinado, quienes dijeron a la policía que, horas antes, había existido una "fuerte discusión familiar" dentro del domicilio.
Por otro lado, los voceros señalaron que la mujer detenida tiene un trastorno con el consumo de drogas y señalaron que iba todos los días a pedirle dinero a su padre y que, en algunas ocasiones, le robaba objetos de valor.
En cuanto a los resultados preliminares de la autopsia de Carlos Montaña, fuentes judiciales indicaron que el hombre falleció por los golpes recibidos y no como consecuencia de una caída posterior.
Al respecto, los investigadores señalaron que todavía no está establecido el objeto con el cual fue agredido el jubilado.
Interviene en la investigación la fiscal Karina Gallo, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 de Quilmes, quien imputó por el delito de "homicidio agravado por el vínculo", a la mujer, luego de que ésta se negara a declarar durante su indagatoria.
