Hubo una jugada que pudo cambiar la historia del clásico: el tanto anulado a Ivo Mammini por una presunta posición adelantada, que no se terminó convalidando por disposición del VAR. Desde Estudiantes entendieron que es una típica jugada muy fina propia de estos tiempos; pero desde Gimnasia, por el contrario, la sensación generalizada fue que dicha sanción perjudicó seriamente al "Lobo" y al respecto el DT fue categórico.
"Es una opinión muy personal pero el gol es gol para mí. Con esas líneas trazadas, fue todo muy difuso", opinó en ese sentido, de manera contundente, el entrenador Leonardo Madelón. Y pese a que reconoció que ambos equipos tuvieron momentos de dominio, a la vez, sentenció que "se sintió el impacto tras la anulación" y que dicha acción tuvo influencia en el resto del desarrollo. Además, entendió que el supuesto penal a Mammini también "al menos la podrían haber revisado".
De todos modos, concluyó: "Ya está. No hay que llorar. Lo que sí quiero es agradecerle a los jugadores y a los hinchas por todo el apoyo. Fue muy lindo vivir este clásico". Y después de todo el análisis pertinente, para el final, dejó un mensaje esperanzador para los hinchas más allá de la desazón por la victoria que no se dio. "Se hizo de ida y vuelta, no son fáciles estos partidos y siempre es importante sumar. El equipo está madurando y estoy conforme”.
