Martín Guzmán mantuvo una reunión con la Oficina de Evaluación Independiente (OEI) del FMI, que evalúa la implementación de las políticas de acceso excepcional del Fondo.
“Vinieron a Argentina a auditar si los criterios de acceso excepcional del FMI para el préstamo Stand-By de monto récord histórico que le dieron al Gobierno de Macri en 2018 se cumplieron o no”, reveló el ex Ministro de Economía.
“Aquel préstamo se usó para evitar reestructurar deuda externa insostenible y financiar la salida de Argentina de los capitales que vinieron a especular en la era Macri-Caputo-Sturzenegger (2015-2018). Esto no es una opinión, es un dato, y el propio staff del FMI lo ha reconocido en su llamada Evaluación Post-Programa de 2021”, señaló.
La Oficina de Evaluación Independiente (OEI) del FMI está evaluando las condiciones en que se otorgó al gobierno de Mauricio Macri el crédito de 57 mil millones de dólares.
— Alberto Fernández (@alferdez) March 7, 2024
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En ese marco, Guzmán contó cuáles fueron los criterios incumplidos. “El CA2 dice que el FMI solo le puede prestar a un país miembro si la deuda es sostenible con alta probabilidad. El Gobierno y el FMI plantearon que en 2018, luego de haber perdido acceso al mercado de crédito, la deuda era sostenible, y que el problema era de liquidez, no de sostenibilidad. Desde el gobierno marcaban por entonces que el problema de liquidez se debía al temor del mercado a que la siguiente elección la ganase la por entonces oposición. En criollo: según aquel gobierno, el problema de liquidez era el temor del mercado al kirchnerismo”, expresó.
“Pero bajo ese argumento, prestar para resolver el problema de liquidez era equivalente a prestar para favorecer las chances del gobierno de Macri de ganar la elección presidencial de 2019”, agregó sobre ese punto.
“El CA3 dice que tiene que haber perspectiva de acceso al mercado de crédito durante el período de repago del programa con el FMI para poder pagarle al propio FMI. ¿Qué justificación usó el FMI para decir que este criterio se cumplía? Que hubo financiamiento de híper corto plazo en pesos y con fondos que habían venido a especular a la Argentina al que el gobierno acudió en 2019, con mercados de crédito internacionales ya cerrados para el país. Esto es como razonar así: ‘El fuego se apaga con un líquido. El kerosén en un líquido. Usemos kerosén para apagar este fuego’”, siguió detallando Guzmán.
En otro pasaje, señaló que “en la Evaluación Post-Programa del SBA de 2018 que realizó el staff del FMI en 2021, se reconoció que la razón por la cual no se impulsó una reestructuración de la deuda externa insostenible en 2018 ni se adoptaron controles de capital para evitar que el 100% del préstamo del FMI se esfume en un salvataje a bonistas externos y en financiar una fuga de capitales histórica, fue la de respetar las preferencias del Gobierno de turno”.
“Las acciones del FMI y hasta las declaraciones públicas de ex funcionarios de aquel mismo gobierno indican que la deuda que hoy tiene Argentina con el FMI fue la consecuencia de un préstamo político para financiar la campaña del Gobierno de Macri”, consideró Guzmán.
Y completó: “Ojalá que la OEI del FMI haga un trabajo que eche luz sobre este fraude histórico que benefició a algunos y que tanto perjudicó al pueblo argentino”.
Alberto Fernández se hizo eco de la publicación de Martín Guzmán y también se refirió al tema.
“La Oficina de Evaluación Independiente (OEI) del FMI está evaluando las condiciones en que se otorgó al gobierno de Mauricio Macri el crédito de 57 mil millones de dólares. Están desde el domingo pero no lo viste en ningún medio. Ocurre que las noticias importantes se tapan”, indicó.
