La actividad industrial pyme experimentó otro fuerte descenso en el mes de abril, marcando una baja interanual del 18,3%, y cerró el primer cuatrimestre con una merma de 19% en comparación con el mismo período de 2023, de acuerdo al relevamiento elaborado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
La nueva baja en el indicador de la actividad es la sexta consecutiva y fue la más profunda de los últimos tres meses, ya que luego del derrumbe del 30% interanual en enero, había atenuado el retroceso al 9,9% en febrero y al 11,9% en marzo.
A pesar del nuevo registro negativo en la variación anual, el análisis exhibió un signo de recuperación en la comparación mensual, ya que la producción repuntó 3,1% en la medición desestacionalizada.
El Índice de Producción Industrial Pyme (IPIP) reflejó que las empresas operaron con 70,1% de su capacidad instalada en el cuarto mes del año, mostrando un aumento de 0,1 puntos porcentuales frente a marzo.
Desde la entidad gremial-empresaria explicaron que “durante el mes de abril, la industria pyme se encontró con una situación marcada por la escasez de consultas y pedidos de producción, aunque la reposición de stocks se desarrolló sin mayores complicaciones y los insumos estuvieron fácilmente disponibles”.
Los seis sectores manufactureros del segmento pyme tuvieron caídas en la comparación anual en abril, siendo los más afectados “Papel e Impresiones” (-32,3%) y “Metal, maquinaria, equipos y material de transporte” (-23,7%).