Alberto Bochatey, administrador apostólico de La Plata, habló este jueves desde la Catedral. Ocupará de forma interina el lugar dejado por Gabriel Mestre hasta que se designe al nuevo arzobispo.
En primer término, Bochatey se refirió a la renuncia de Mestre: “Nos tomó por sorpresa”, reconoció.
“Fue por un tema que no pasó en La Plata, sino en Mar del Plata. Esto nos provoca un cambio. Veníamos con el ímpetu de lo nuevo, de una persona joven con mucho entusiasmo”, señaló.
Respecto a cuándo se conocerá al reemplazante de Mestre, indicó: “No sabemos, no hay tiempos”.
“El Papa Francisco no ha sido en general de alargar mucho los tiempos. Nunca ha pasado una que una diócesis esté sin arzobispo más de tres meses”, sostuvo.
“Ni el Papa Francisco pensaba que La Plata iba a quedar vacante. Creo que lo agarró a trasmano”, agregó Bochatey.
Consultado sobre la figura de Javier Milei, dijo: “Vamos a ver, es un misterio. Hay mucha gente que sigue con esperanza”.
“Se había tocado un fondo muy grande. La corrupción era inmensa. Hay que fijarse lo que está pasando con los alimentos. Me duele como cristiano. Hay hambre y se están tirando la caja de los alimentos por la cabeza”, indicó.
Y se lamentó: “Hubiera sido un ejemplo maravilloso de amor a la Argentina que el oficialismo y la oposición dijeran ‘paremos los cañones, repartamos esto y después seguimos peleando’, pero no sucedió”.
Luego volvió sobre el gobierno nacional: “En la medida en que se olvide lo humano, nunca va a andar bien. El populismo si no educa, tiene mayor éxito. Hemos caído en el tema de escolaridad enormemente. Casi el 60% de los chicos no termina el Secundario. Eso es un atraso inmenso”.
“No es Milei Sí o Milei No, ni peronismo Sí o peronismo No. El caos está. Miremos para adelante y tratemos de construir”, concluyó.