En las redes sociales se desató un intenso debate sobre el comportamiento de los usuarios del Tren Roca.
“Les dejamos una reflexión. ¿Por qué pudiendo elegir ir al pasillo, preferimos quedarnos amontonados en la puerta, a pesar de que falta mucho para bajar? ¿Será que no nos importa?”, lanzaron desde el grupo de Facebook “Cosas del Roca”.
Rápidamente llovieron los comentarios con opiniones y experiencias personales. ¿Egoísmo, comodidad o exageración?
“La explicación lógica está. Si te vas al medio del pasillo, después nadie se corre cuando tenés que bajar vos. Se vuelve misión imposible ir hasta la puerta, aunque te bajes lejos. No necesitas pegar muchas neuronas para darte cuenta igual”, fue la primera reacción.
“Excelente reflexión, lástima que cada uno piensa en su propia comodidad y les importa una m....a que el resto de la gente no pueda subir”, sumó otro.
Y hubo más enojados: “Detesto la gente que hace eso. Mi teoría es que les importa un carajo de los demás. Y nos les da la cabeza para entender que aun estando en el pasillo podrán bajar llegado su momento. En fin cabezas de termo y ya. No hay explicación lógica”.
Pero también estuvieron quienes le bajaron el tono a esa situación: “La verdad me sorprende de lo que están hablando. Yo sólo veo gente viajando en la puerta si el tren viene muy cargado, como suele ser habitual, incluyendo los pasillos. No sé a donde pretenden que se ponga la gente... Después, estamos los que solemos viajar a los costados de la puerta, pero yo nunca molesté a nadie haciendo eso, ni me sentí molestado con esto cuando subo o bajo”.
“Otro aspecto interesante que suele suceder es que mucha gente no sabe viajar en transporte público: si estás viendo que el tren se va a llenar hasta el tope y estás ubicado en el pasillo (sea sentado o parado), buscá ir acercándote a la puerta todo lo que puedas, por lo menos una estación antes, o mucho antes también si es necesario”, agregó la misma persona.
“Es por puro egoísmo. Las puertas son para subir y bajar, pero para los pasajeros es mucho más cómodo quedarse en la puerta y estorbar. Ah, y putear cuando los empujan en cada estación para subir y bajar, incluyendo al punga que les arrebata el celular en un descuido...”, aportaron también. Picante polémica del mundillo del Roca.
