Las ventas al por mayor de productos esenciales en Argentina cayeron un 6% en abril, reflejando el impacto de la crisis en toda la cadena de comercialización. Este dato fue informado por la Cámara Argentina de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas (CADAM).
Así, durante abril, los hábitos de consumo mostraron una clara tendencia hacia la búsqueda de marcas más económicas y la postergación de la compra de productos no esenciales. Los sectores más afectados incluyen el cuidado personal, cosmética y perfumería.
Ante este panorama, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) publicó una encuesta de autoservicios mayoristas que abarca desde alimentos hasta electrónicos, indumentaria y textiles para el hogar. Sin embargo, CADAM elaboró un monitor específico para productos de consumo masivo esenciales, como bebidas, almacén, panadería, lácteos y artículos de limpieza y perfumería, para proporcionar datos más detallados.
Los resultados plasmaron una caída del 6% en las ventas comparadas mes a mes en precios corrientes. CADAM señaló que la disminución de las expectativas inflacionarias y la reducción de ventas “han generado un proceso de desinflación debido a la competencia entre mayoristas y grandes cadenas”.
En este contexto, los minoristas han reducido sus grandes compras, lo que podría explicar la baja del 6% en abril respecto de marzo. También se observó una menor cantidad de unidades por ticket y una menor frecuencia de compras.
En tanto, es importante mencionar que el 61% de las ventas se realizan a través del canal tradicional de comercio, compuesto por mayoristas que abastecen a una red de 140 mil almacenes, farmacias, perfumerías y 13 mil autoservicios en todo el país, atendiendo principalmente a las compras diarias de familias de menores recursos.
