El Ministerio de Ambiente de la provincia de Buenos Aires amplió una resolución que solo alcanzaba al Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) para que todos los barrios cerrados y clubes de campo de los distritos bonaerenses realicen la separación de los residuos.
“Trabajamos junto a los municipios para mejorar sus sistemas de gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU). Por eso, elaboramos una resolución que amplía las obligaciones de separación y tratamiento a todos los Barrios Cerrados y Clubes de Campo de la Provincia”, indicaron desde la cartera que dirige Daniela Vilar.
“Anteriormente, esta obligación abarcaba sólo al AMBA. Así, igualamos las condiciones para hacer valer el esfuerzo de cada gobierno local y sus vecinos en la gestión integral de residuos y disminuimos el volumen de residuos que terminan en rellenos sanitarios o basurales a cielo abierto”, expresaron.
Se trata de una política que, según comunicaron, reduce el daño ambiental, disminuye costos y mejora la calidad de vida de los ciudadanos bonaerenses fortaleciendo al circuito de la Economía Circular.
En el territorio de la provincia de Buenos Aires hay actualmente unas 1.000 urbanizaciones cerradas, y hasta ahora, solo el 10% tenía como obligación separar y tratar correctamente los residuos.
Las obligaciones de separación y tratamiento de RSU alcanza a las siguientes categorías:
-Secos reciclables
-Poda
-Construcción y demolición
-Residuos de aparatos eléctricos electrónicos (RAEE)
Con la ampliación de la resolución, los habitantes de barrios cerrados y clubes de campo deberán:
-Separar y tratar sus residuos
-Priorizar que el tratamiento de los residuos secos reciclables sea realizado por cooperativas de recuperadores urbanos
-Tratar sus RAEE si la urbanización cuenta con las de 200 viviendas
-Extender la vigencia de los planes de Gestión a dos años.