La inflación de los alimentos volvió a acelerarse casi un punto en la primera semana de agosto, impulsada por los lácteos, las bebidas y los panificados, con lo que anotó su mayor suba en un mes.
Se trata de un factor más que agrega presión a los precios de agosto, sumado a la eliminación de retenciones en algunas cadenas del agro y a la suba de los servicios de la semana pasada.
Concretamente, la suba de precios en los alimentos fue de 1,3% durante la primera semana del mes, lo que implicó una aceleración de 0,8 puntos porcentuales respecto a la última semana de julio, precisó un informe de la consultora LCG.
Fue la mayor suba semanal en los alimentos durante el último mes, desde el aumento del 1,8% de la primera semana de julio. En ese momento, CAME precisó que hubo un traslado a precios general de entre el 6 y el 7% tanto a nivel mayorista como minorista.
Esta suba de inicios de agosto estuvo explicada principalmente por los incrementos en lácteos (3,5%), bebidas (2,6%) y panificados (2,4%). La cifra final de 1,3% se alcanzó compensando la baja en condimentos (-3,7%) y verduras (-3,8%), un rubro altamente estacional.
De este modo, la suba promedio mensual se ubicó en 2,8%, mientras que la medición punta a punta de las últimas cuatro semanas se aceleró a 2,6%. La cantidad de productos con aumento se incrementó en 6 puntos porcentuales respecto a la semana previa, por lo que alcanzó al 30% de los productos relevados.
