Un funcionario del Ministerio de Defensa de Bielorrusia acusó al famoso juego móvil Pokémon Go de ser una herramienta de inteligencia occidental. Alexander Ivanov, jefe del Departamento de Trabajo Ideológico del ministerio, afirmó que el juego fue utilizado para recopilar información sobre la aviación bielorrusa cerca de Minsk durante su pico de popularidad, hace casi una década.
En una una aparición en el programa de televisión bielorruso “En esencia”, Ivanov expresó: “¿Dónde se encontraban la mayoría de los Pokémon en ese momento? En el territorio de la base aérea 50, donde está la pista de aterrizaje, donde hay mucho equipo de aviación militar. Esta es información de inteligencia, ¿no es cierto?”. Ivanov introdujo el tema de Pokémon Go en una discusión sobre los bienes culturales con más probabilidades de ser objetivos de espías.
Pokémon Go, un juego de realidad aumentada lanzado en 2016, permite a sus millones de jugadores capturar Pokémon digitales utilizando sus smartphones en el mundo físico. El juego promete a los usuarios que “se pueden encontrar en cada rincón del mundo”. Pokémon es una franquicia japonesa que incluye videojuegos, cartas coleccionables y una serie de televisión presentada en 1996.
Desde su lanzamiento, el videojuego ha promovido la actividad física y la exploración al aire libre. Además, ha organizado eventos globales que reúnen a jugadores de diferentes países.
Ivanou rememoró los días en que “todos los adolescentes, niños estaban en alguna aplicación; uno encendía la cámara, realidad aumentada, y buscaba algunos Pokémon raros, los recogía en una colección”. Además, vinculó la proliferación de Pokémon en ciertos puntos estratégicos a posibles actividades de espionaje.
Rusia, aliada cercana de Bielorrusia, advirtió en su momento que el juego podría representar un riesgo para la seguridad, mientras que medios rusos afirmaron que era un complot de la CIA. Niantic, el desarrollador estadounidense de la aplicación, negó rotundamente que Pokémon Go fuese una herramienta de espionaje.