El pasado 14 de octubre, la Asociación de Amigos de Calle 12, una de las principales organizaciones de comerciantes de La Plata, quedó en el centro de la polémica tras la intervención de la Dirección Provincial de Personas Jurídicas (DPPJ).
La medida fue tomada a raíz de una denuncia presentada por un grupo de comerciantes bajo el nombre "Unidos por Calle 12", quienes acusan a la actual Comisión Directiva de múltiples irregularidades en el manejo de la institución y del proceso electoral.
Según se dio a conocer, la denuncia, encabezada por varios socios del centro comercial, señala graves violaciones al estatuto de la asociación, las cuales incluyen la falta de transparencia en la confección del padrón electoral, la omisión de notificaciones oficiales a los socios, y la manipulación de las actas de reuniones.
Además, los denunciantes afirman que la Comisión Directiva intentó autoproclamarse en los cargos, evitando una competencia democrática y equitativa en las últimas elecciones del 25 de abril de 2024.
Entre los miembros señalados se encuentran Martín Ranea (Antares), presidente de la entidad, junto con Cristina Restucci (Mundo Pastel), Alejandro Frangi (sin comercio declarado), Ana Pissano (Pisano Calzados), Gabriel Bustos (Todo Carteras), Mariano Caferata (Un Buen Día Regalos), Pablo Lara (sin comercio declarado) y Jorge Cohan (Albert Sport), y Maximiliano Alanís (Checa).
Este grupo es acusado de haber llevado a cabo un proceso electoral irregular que dejó fuera de la contienda a la lista opositora, conformada por "Unidos por Calle 12", generando descontento y sospechas de autoproclamación.
El artículo 29 del estatuto social de la Asociación establece que el padrón de socios con derecho a voto debe publicarse 30 días antes de la asamblea, sin embargo, los comerciantes denunciantes aseguran que esta regla no se cumplió.
El padrón recién se hizo público el 4 de abril, contraviniendo los plazos establecidos, lo que llevó a que varios socios quedaran fuera del proceso electoral. A esto se sumó la falta de convocatoria formal mediante circulares enviadas a los domicilios de los socios, una medida estipulada en el artículo 26 del estatuto, y la ausencia del balance de la institución, elemento fundamental para la votación.
La DPPJ, tras evaluar la denuncia y los documentos presentados, emitió una resolución en la que declara nula la asamblea del 25 de abril y ordena la realización de nuevas elecciones. La Dirección intimó a la Comisión Directiva a convocar a una nueva asamblea en un plazo de 10 días hábiles, durante la cual deberán esclarecerse los hechos ante los socios y reorganizarse el proceso electoral conforme a los estatutos y la normativa vigente.
Este escándalo ha generado un fuerte impacto en la comunidad platense, ya que la Asociación de Amigos de Calle 12 es una entidad central para el comercio de la ciudad. Comerciantes, vecinos y miembros de la organización han manifestado su preocupación ante los supuestos malos manejos y la falta de transparencia. Según algunos testimonios, este conflicto marca "un antes y un después" en la historia de los centros comerciales a cielo abierto de la ciudad.
En los próximos días, la Comisión Directiva deberá rendir cuentas ante sus socios y la DPPJ, mientras que la comunidad estará atenta al desarrollo de este proceso que podría redefinir el futuro de la Asociación y el comercio en Calle 12.