El entrenador de Gimnasia, Marcelo Méndez, habló en rueda de prensa luego de la eliminación ante Boca, por penales, y dio su parecer de la derrota que sufrió el conjunto "Tripero" en los cuartos de final de la Copa Argentina. Fiel a su estilo, el uruguayo no puso excusas y admitió la desazón por la caída. Además, reconoció que será importante levantarse en el próximo partido y dejó en claro cuáles son los objetivos para lo que resta de la temporada.
"Enfrentamos a un gran rival con mucha jerarquía y en ningún momento sufrimos el partido. El primer tiempo fue controlado, tuvimos situaciones y nos posicionamos en campo rival pero en el segundo no tuvimos mucha claridad. Aunque terminamos mejor, en los penales no tuvimos eficacia", analizó, en primer lugar, acerca del trámite del partido. Al mismo tiempo, valoró que el equipo hizo "un desgaste muy grande, dio la cara y se plantó de igual a igual".
"Nos duele mucho porque teníamos ilusión y no merecíamos irnos de esta forma", agregó posteriormente en cuanto al desarrollo de las acciones y acerca de los penales en sí expresó que "para muchos jugadores fue la primera definición que tienen" y entendió que en estas instancias "la jerarquía pesa", por eso "hay que aprender, crecer y mejorar". Por otra parte, evitó hablar de los jueces y antes de fijar los objetivos próximos, destacó al hincha: "no para de sorprender la gente".
Para lo último, entonces, habló de la renovación de desafíos ante esta decepción y señaló que "lo que queda es la lucha por un lugar a copa" y explicó: "el equipo contra estos rivales da la cara. Ahora los problemas son llegar a este nivel contra otros y ésa es la diferencia". De tal modo, afirmó que "es obligación cumplir el otro objetivo" y concluyó: "Trataremos de recuperarnos, estamos golpeados pero en estas 10 fechas nos jugamos el año deportivo".




