A poco más de un año del crimen del jubilado de Lanús, la Justicia condenó a prisión perpetua al principal acusado.
La víctima había salido de su casa para pasear a su perro y, cuando estaba por ingresar a su vivienda, dos delincuentes lo abordaron con intenciones de robo. Luego, uno de ellos lo apuñaló.
Pese a que en un primer momento eran dos los sospechosos por el asesinato de Arnaldo Díaz, un hombre de 70 años, la Justicia avanzó solo con la imputación contra Sandro Giménez, de 34 años, por el delito de homicidio agravado criminis causa en concurso real con robo calificado por empleo de arma. Mientras tanto, su cómplice fue acusado por encubrimiento.
En este contexto, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3 de Avellaneda-Lanús condenó a Giménez a cadena perpetua luego de casi un mes de juicio oral, de acuerdo con la información del medio local Diario Conurbano. El proceso había comenzado el 21 de octubre.
El crimen ocurrió el 6 de septiembre de 2023 en Remedios de Escalada, cuando dos sospechosos fueron arrestados pocas horas después de que se registrara una entradera en la que la víctima fue interceptada mientras paseaba a su perro, tal como informó el personal de la Comisaría 4° de la Policía Bonaerense. Entre ellos, se encontraba Giménez.
La pareja de Arnoldo alertó sobre el violento episodio ocurrido en su domicilio de la calle Guido Spano. Según su relato, mientras el jubilado paseaba a su perro, fue abordado por un hombre que lo forzó a regresar a la vivienda.
Dentro del domicilio, los delincuentes no solo sometieron a la víctima, sino que también forcejearon con la mujer. En medio del ataque, uno de los agresores tomó un cuchillo tipo Tramontina y apuñaló a Arnoldo en múltiples ocasiones: en el abdomen, la espalda y la cabeza.
Tras el ataque, los agresores huyeron del lugar llevándose celulares, una suma de dinero en efectivo y la alianza de boda de la víctima. Arnoldo, gravemente herido, fue trasladado al Hospital Evita, donde lamentablemente falleció a las 2 de la madrugada debido a la gravedad de las lesiones.
El primer sospechoso en ser identificado fue Giménez, quien resultó detenido en la intersección de Don Orione y José Hernández, en la localidad de Remedios de Escalada. Al momento de su detención, el ahora condenado solo había cambiado su campera, pero seguía vistiendo el mismo pantalón y zapatillas que habría usado durante el ataque. Las manchas de sangre, visibles a simple vista, y las huellas de las suelas de sus zapatillas coincidían con las encontradas en el domicilio de la víctima.
