Fiel a su estilo, el entrenador de Gimnasia, Marcelo Méndez, no anduvo con rodeos a la hora de declarar. Y después de lo que habían sido sus duros dichos en Avellaneda, ante Independiente, esta vez también optó por la crudeza incluso en un contexto victorioso, tras el 1-0 frente a Atlético Tucumán. El DT uruguayo dejó en claro que hoy priorizó el resultado por sobre la forma para traer tranquilidad, y al mismo tiempo remarcó que el plantel debe seguir sumando, para cerrar la temporada de la mejor manera y redondear un balance positivo.
"Lo importante era ganar y que la gente se vaya contenta. Sinceramente no es esto lo que yo busco. Hoy dejamos un poco el modelo de juego a un lado para lograr el resultado y eso es muy peligroso. Por momentos sufrimos y no nos gusta hacer este tipo de planteamientos. Tenemos mucho trabajo por delante", reconoció de manera descarnada, en el inicio de la conferencia de prensa. Asimismo, en cuanto al análisis del trámite, rescató que el equipo "comenzó el partido con una buena intensidad" y enfatizó: "en el inicio del segundo tiempo ellos tuvieron algunas chances pero pudimos tener un poco más la pelota y fuimos más dinámicos".
Además, evitó hacer balances prematuros a esta altura de la temporada y consideró que hay que seguir ganando "porque es la última imagen que vamos a dejar en este año" y agregó: "Faltan algunas fechas y la conclusión se va a hacer después y la gente se acuerda de lo último”. Finalmente, bancó a sus dirigidos y evidenció porque viene optando por una lista acotada, sin los 23 futbolistas que contempla el reglamento. "Hay que ganarse el lugar para estar entre los concentrados. En eso se explica que a veces no completamos todos los cupos", deslizó, sin entrar en nombres propios.