
El argentino que murió en el accidente aéreo de Washington, Estados Unidos, fue identificado como Luciano Aparicio, quien tenía un alto cargo en una empresa dedicada a la generación y distribución de energía eléctrica.
El hombre se encontraba junto a su hijo de 13 años -de nacionalidad chilena- entre los 66 pasajeros del avión que chocó con un helicóptero del ejército durante el aterrizaje en el Aeropuerto Nacional Ronald Reagan de Washington D.C.
Aparicio, oriundo de Buenos Aires y radicado desde hace varios años en la capital estadounidense, era un contador formado en la Universidad de Buenos Aires (UBA) y miembro de una empresa energética con sede en Estados Unidos. También era Director General de Fusiones y Adquisiciones en AES Corporation, una compañía multinacional que se dedica a la generación y distribución de energía eléctrica, la cual está ubicada en Arlington, Virginia.
En su puesto más reciente, se dedicaba a dirigir adquisiciones, desinversiones y asociaciones globales, mientras que además se hacía cargo de varios proyectos de desarrollo de energía solar y almacenamiento de baterías en California, así como una oficina de desarrollo eólico.
Estudió un Máster en Administración de Empresas (MBA) de la Universidad de Tulane/Universidad de Chile, un Programa de Desarrollo de Liderazgo AES de la Escuela de Negocios Darden de la Universidad de Virginia y un Programa de Desarrollo de Liderazgo en Finanzas AES de la misma casa de estudios.