En plena conmoción por el crimen de Kim Gómez, la niña de 7 años que murió tras ser arrastrada durante 15 cuadras en un robo de auto, familiares y amigos volvieron a movilizarse esta mañana hacia el Juzgado de Menores de La Plata para exigir justicia y acompañar a los padres en su reclamo.
Según confirmaron fuentes judiciales, los padres de la nena pidieron estar presentes en las audiencias con los menores acusados del hecho. Trascendió que el adolescente de 17 años se mostró impávido frente a la jueza María José Lescano. Resta el turno del menor de 14 años.
Carmen Ibarra, titular de la UFI N°3 de menores de La Plata, pidió la prisión preventiva para T., el acusado de 17 años. Por su parte, para el de 14, solicitará que se mantenga privado de su libertad. Ambos están acusados de “homicidio en ocasión de robo”.
Bajo el grito de “¡Justicia!”, Marcos Gómez, padre de la menor, llegó conmovido a la audiencia en la que se definirá la situación de los dos adolescentes detenidos por el homicidio. Llevaba consigo un peluche de Kim, un juguete con forma de carpincho, que era el preferido de la nena.
Ayer, mientras se desarrollaba el velatorio de Kim, Marcos reveló un detalle sorpresivo. Dijo que el padre de uno de los delincuentes, Héctor, se comunicó con él. Según contó, el hombre quiso pedirle disculpas. “Tu hijo me la mató. Vení a enfrentar mi dolor. Andá al cementerio a despedir a mi hija”, relató Marcos. En un momento de máxima emoción, Marcos mencionó un detalle, y le hizo un pedido simbólico. “A mi hija le gustan los capibaras. Llevale uno”, dijo.
A diferencia de la protesta anterior, en la que hubo hechos de violencia, en esta ocasión la movilización transcurrió sin enfrentamientos y la Policía Bonaerense tampoco recurrió al corte de calles.
La manifestación fue convocada para las 9.00 en el Fuero Penal de La Plata, ubicado en la calle 8, entre 56 y 57. El llamado a la protesta, impulsado por familiares y amigos, circuló con un flyer en reclamo de justicia.
En la marcha, estuvieron presentes otras víctimas de la inseguridad, como los abuelos de Mateo Yagame, el joven de 19 años que fue apuñalado con una herida mortal por un adolescente de 14, en un intento de robo en Los Hornos.