Un nuevo hecho de inseguridad tuvo como víctima otra vez a un taxista que estaba realizando su trabajo. Lo particular de este hecho está en la modalidad que usaron los ladrones para robarle al conductor.
Alrededor de la medianoche, el taxista recogió en la parada de taxis de 12 y 57 a una mujer con sus tres pequeños hijos, dos de ellos de aproximadamente 6 años y un pequeño de unos meses. La mujer le pidió ir hasta 157 y 55, y comenzaron lo que parecía un viaje más.
Sin embargo, en medio del camino, la pasajera le pidió al conductor detenerse en el cajero del Banco Provincia que se encuentra en 137 y 66. La mujer bajó con el bebé y al cabo de unos minutos volvió con un hombre.
El extraño le consultó al chofer cuánto costaba el viaje para distraerlo. Y, de un momento a otro, sacó un cuchillo y amenazó al taxista reclamándole que le dé la plata que tenía encima. El ladrón le sacó la billetera con 30.000 pesos, y el conductor, en un momento de desesperación, apretó el acelerador y logró escapar del lugar.
Claramente, la presencia de los niños fue una puesta de escena para que el chofer bajara la guardia y no se diera cuenta de sus intenciones.




