
Un hombre de 60 años que trabaja como chofer en Uber fue víctima de un inesperado asalto en la zona de 19 y 82.

El episodio tuvo lugar a las 02.10 cuando el conductor aceptó un viaje desde 31 y 68.
Allí, dos personas abordaron el vehículo: una mujer que dijo estar embarazada y que por ello pidió si la dejaba pasar al asiento delantero.
Al llegar a destino, el hombre descendió del vehículo, aparentemente con intención de buscar dinero para abonar el servicio.
Sin embargo, la situación tomó un giro inesperado cuando el conductor, distraído momentáneamente con su teléfono celular, notó que la mujer supuestamente embarazada había tomado la llave de encendido del vehículo y la arrojó fuera.
Insólitamente, la agresora sacó un arma blanca y, en un intento de reducir al conductor, le provocó un corte en el brazo izquierdo.
En medio de la resistencia, logró despojarlo de su celular y, tras amenazarlo nuevamente con el arma, huyó del lugar. De todas formas, el conductor tenía un juego de llaves de repuesto y logró dirigirse a un centro asistencial.