Un ataque con disparos contra la guardia del Hospital San Roque de Gonnet dejó seis heridos. Se investiga un presunto enfrentamiento barrabrava. En ese marco, una testigo relató el minuto a minuto de la feroz balacera que obtuvo relevancia nacional.
"Llegaron como 200 en camionetas y autos, con armas, palos y fierros. Le pagaron a mi marido y a otros chicos que estaban esperando al que estaba herido", dijo Silvina.
Un hombre identificado como Francisco Sacconi, de 45 años, fue apuñalado horas antes en calle 14 y 36. Cristian Camilleri, jefe de la barrabrava de Gimnasia, sufrió heridas de bala e ingresó al quirófano. Quedará internado fuera de gravedad. Otros dos heridos fueron identificados como Juan Roberto Arcaujo, de 45 años, y Mauro Perrilli, de 35 años. Por el momento se desconoce la identidad de las dos personas restantes.
Todo comenzó cuando Francisco, también integrante de la barrabrava del Lobo, fue atacado por al menos tres hombres en calle 14 y 36. "Le dieron una paliza bárbara, le dieron unos puntazos", dijo Silvina. El hombre regresaba de Plaza San Martín, donde un grupo de barras triperos ingresó en un intento por agredir a Iván Tobar, secretario general de la Agrupación Blanca y Azul de La Plata y uno de los hombres que maneja la tribuna de Estudiantes.
Cuando los agresores se enteraron de que la víctima había sido internada en el Hospital San Roque de Gonnet, fueron al lugar. “Llegaron como 200, en camionetas y autos, con armas, palos, fierros” a atacar al grupo de Gimnasia y se desató el caos en la guardia cuando comenzaron a escuchar los tiros. “Empezaron con un tiroteo bárbaro. Hay sangre por todos lados”, relató la mujer.
A su esposo y a otros amigos, que estaban esperando noticias sobre el estado de salud del compañero internado, les dieron “un palazo”. "A mi marido le pegaron con un hacha. Estaban muy violentos”, contó Silvina. Había menos de 10 integrantes del grupo de Gimnasia en el hospital en el momento del ataque.
Todo sucedió en medio del personal de salud y los familiares de pacientes que estaban en la sala de espera, que tuvieron que tirarse al piso.
Tras varios minutos, los agresores se retiraron del lugar y dejaron abandonado uno de los vehículos en el que llegaron, un Fiat Uno Ptte LGE 218 que los efectivos policiales secuestraron como parte de la investigación.
La causa fue caratulada como “lesiones y averiguación de ilícito”, en la que interviene la UFI N° 03 del Departamento Judicial de La Plata, a cargo del fiscal Gonzalo Petit Bosnic, quien ya ordenó las pericias correspondientes para esclarecer los hechos.
