Amina Fassi es una joven oriunda Cañuelas de 30 años que llegó a La Plata hace unos años para seguir su pasión artística: el tatuaje.
“Siempre me gustó dibujar y pintar”, contó Amina en diálogo con LaPlata1.com, y aclaró que para el tatuaje es necesario saber dibujar. Y agregó cómo llegó al mundo del tattoo: “Desde muy chica que tengo acercamiento con el arte y surge lo de tatuar cuando un día por allá a finales del 2014, una chica que tenía agregada en Facebook, ella muy de la onda under/grunge, estaba haciendo un curso en capital y ahí dije ‘A ver qué tal esto’”.
Si bien ese curso le gustó, no la ayudó a obtener respuestas acerca de lo que quería hacer. “Yo en esa época estaba en búsqueda de caminos para poder vivir del arte que es lo que más me gusta y desafortunadamente, es algo que en este país siempre estuvo muy poco valorado y apoyado”, nos dijo.
No obstante, todo cambió a partir de un regalo clave que le hicieron. “Mi padrastro me regala mi primera máquina allá por el 2016 para un cumpleaños y ahí empezó todo este camino”, recuerda Amina. Además, reconoce que seguir su pasión la ayudó a superar muchas cosas. “Todo lo que nos cuesta, lo que nos trae frustraciones y dificultades, al superarlo después te da una satisfacción tremenda. Y eso me pasó cuando empecé a tatuar”, contó.
Esta joven trabajó como tatuadora en Cañuelas, pero en diciembre de 2018 llegó a La Plata para buscar más oportunidades. “En Cañuelas por ese entonces, no había mucha demanda de tattoo. Por eso una amiga un día me ofrece quedarme en su departamento acá mientras ella estaba de vacaciones”, recuerda. Además, nos contó que por casualidad se cruzó con un local de tatuajes y, después de una charla, terminó laburando ahí.
Y Amina tiene una particularidad con su trabajo. Si bien puede tatuar cualquier cosa, se especializa en hacer dibujos en la piel sobre una temática que la atrapó desde chica: el animé. Su acercamiento tuvo que ver con canales infantiles como Magic Kids, Cartoon Network o Fox Kids que pasaban series clásicas como Sailor Moon, Digimon, Inuyasha, Ranma 1/2 o Pokémon. Incluso, sobre este último tiene un particular objetivo: “Actualmente tengo una meta de tatuar los primeros 150 Pokémon”.
Su gusto por el animé la ha llevado a tatuar distintos personajes o cosas relacionadas con este consumo. Y dejando de lado su propio fanatismo, Amina reflexionó sobre lo que significa el animé para muchas personas, al punto de hacerse tatuajes. “En los últimos años, las animaciones japonesas se hicieron mucho más conocidas en el mundo occidental y eso hace que la gente se sienta realmente muy aferrada o identificada a la historia de ciertos personajes y por eso deciden llevarlos en la piel para siempre”, afirmó.
Y sobre la posibilidad de poder juntar su pasión por el tatuaje con la del animé, se mostró muy satisfecha. “La verdad es que me hace muy feliz siempre poder tatuar cosas que me gustan. ¡En especial cosas como animé y videojuegos! Es algo que me levanta el ánimo totalmente cuando me encuentro con alguien que desea tatuarse algo de lo que puedo llegar a dibujar u homenajeando a su animé/personaje preferido”, nos contó.
Amina se siente muy feliz haciendo lo que le gusta, y pudo encontrar la forma de seguir su sueño aplicando varias de sus pasiones. “Amo tatuar en general lo que sea, pero esa es mi prime de la felicidad”, nos dijo sobre poder plasmar en la piel cosas de animé.
