Quienes viven sobre la calle 36 desde 141 a 139 padecen la peor parte ya que es un cruce de camino, pero la situación se generaliza por todo el barrio: Sin asfalto y con pozos que, según los vecinos, parecen “cráteres”, los reclamos a la delegación municipal llevan más de un año y medio sin respuesta.
"Hicimos de todo: presentamos notas firmadas, fotos, video pero nunca obtuvimos una solución", contó una vecina del lugar. Las quejas apuntan no solo al mal estado del camino, sino también a la acumulación de agua, sobre todo los días de lluvia, la falta de mantenimiento y la circulación constante de vehículos pesados que agravan la situación.
Los propios vecinos aseguran haber contratado camiones con cascotes y piedras para rellenar los pozos y mejorar mínimamente la transitabilidad. "Ya sabemos qué camionetas tienen que venir a sacar a los autos que se encajan en las zanjas. Hay que pedir ayuda para salir del barrio", relatan.
Además, denuncian la proliferación de ratas y lagunas que se forman cuando llueve. "Es peligroso. Hay pozos tan profundos que cuando llueve se llenan y no se ven. La calle se pone patinosa y quedan autos cruzados de costado en las zanjas", dijeron.
“Tuve que pagar el arreglo de una perdida de agua cuando le correspondia al Municipio hacerlo”, sostuvo la vecina en referencia a la falta de acción del gobierno platense.
Asimismo, exigen con urgencia un corte de pasto ya que en la cuadra se empiezan a formar pastizales por el propio abandono.
Desde la delegación aseguran que “están al tanto del reclamo”, pero no dieron precisiones sobre cuándo ni cómo se hará el arreglo. "Queremos aunque sea un preasfalto, algo que solucione esto. El barrio crece, pero las calles siguen igual que hace décadas", concluyó la vecina.
