En La Plata hay una labor incansable de múltiples rescatistas de animales, que también suelen contar las duras historias detrás de muchos perros y gatos que son salvados.
Una de estas historias que conmovió en las redes sociales fue la de Nina. El espacio Salvando Patitas realizó una tierna publicación sobre su recorrido.
“Nina fue rescatada de la megatoma cuando tenía 2 meses, fue dada en adopción y nos la devolvieron con 10 meses de edad”, empezaron recordando.
“Le asignamos turno para castrarla varias veces pero quien era su dueña en ese momento nunca podía. Cuando por fin pudimos llevarla a castrar, su dueña nos dice que ya no podía tenerla porque estaba muy estresada y Nina se portaba muy mal… y que necesitaba que la tuviéramos nosotras hasta que ella esté mejor”, siguió contando.
No solo eso. Desde Salvando Patitas, revelaron que “nos la devolvió en celo, y con infección en el útero”.
“Por suerte eso ya quedó atrás y hoy Nina puede ser quien es, gracias a una familia hermosa que se enamoró de ella y de su forma de ser desde que la vieron por primera vez. Nina hoy es feliz, con su nueva familia y con una hermanita de cuatro patas”, completaron.
La familia que adoptó a Nina se hizo eco del posteo y agradeció a Alejandra, de Salvando Patitas. Son de Los Hornos.
“La verdad es que es mucho más fácil adoptar e incorporar a un nuevo integrante en la familia si la perrihija ya está castrada y recuperada, como fue el caso de Nina. Vos hacés un trabajo excelente con los rescatados, sos seria y transparente. TE AGRADECEMOS POR ESO. Gracias por rescatar a Nina del basural y buscar familias para ella”, indicó Hanne, madre de la familia.
“A veces las primeras vinculaciones no prosperan, por las realidades familiares de cada uno, entendemos que a veces eso puede llegar a ser insostenible. Luego vos nos diste la posibilidad de conocer a varios de los perros y perras de tu manada listos para adoptar y allí vimos cuál de todos tenía mayor posibilidad de encajar con nosotros, por su energía, por su forma de ser”, subrayó.
Y agregó: “Vimos que Nina se llevaría re bien con nuestro hijo menor que es igual de intenso que ella, y seguro serian compinches. Y así fue”.
“Hoy Nina me acompaña a todos lados en el auto, sale a hacer ejercicio todos los días y es tan curiosa e inteligente que aprende rápido. Todos los días me acompaña a buscar a su ‘hermano’ a la escuela y mi hijo está feliz”, siguió contado Hanne, muy emocionada.
“Costó más de un mes que empiece a jugar con nuestra perra jack russel, que como ven en las fotos es más chiquita de tamaño, pero a ella también le vino bien la venida de Nina, ahora juegan y duermen juntas. Por todo esto muchas gracias”, completó la mamá. Nina, por fin, recibirá amor de por vida.
