Las exportaciones argentinas de carne y cueros bovinos alcanzaron los 883 millones de dólares en el primer trimestre de 2025. Aunque esta cifra representa una caída del 3,7% en comparación con el mismo período del año anterior, se ubica por encima del promedio de los últimos cinco años. El comportamiento del comercio exterior del sector mostró un cambio importante en la dirección de los envíos.
Uno de los datos más destacados fue el crecimiento de las ventas hacia Estados Unidos, que superaron los 100 millones de dólares y marcaron un récord histórico para un primer trimestre. En ese mercado, los productos argentinos lograron precios por tonelada superiores a los 10.000 dólares, lo que duplicó el promedio general y consolidó a ese destino como uno de los más rentables para el país.
En contrapartida, se produjo una fuerte caída en los envíos a China, que tradicionalmente ha sido el principal comprador de carne argentina. Las exportaciones hacia ese país se redujeron un 30% interanual, lo que impactó directamente en el volumen total despachado y modificó el peso relativo de ese destino en el esquema exportador.
En cuanto al volumen, se exportaron más de 160.000 toneladas en el trimestre, lo que representa una baja del 14% en comparación con 2024. Sin embargo, el valor por tonelada exportada creció en algunos destinos específicos, permitiendo compensar parcialmente la caída en el volumen general de ventas.
Este panorama plantea nuevos desafíos para la cadena de valor cárnica argentina. La diversificación de destinos y la búsqueda de mercados con mayor valor agregado aparecen como claves para sostener los ingresos del sector, en un contexto internacional marcado por la volatilidad de la demanda y las diferencias en los precios según el destino.