Todo comenzó con una simple pregunta en un grupo de amigos: “¿Están para un asado?”. Uno de los integrantes del chat respondió que no podía sumarse porque tenía que estudiar, sin imaginar que su comentario lo convertiría en blanco de bromas durante todo el día.
“Estoy estudiando 5 horas a la mañana y 5 horas a la tarde”, explicó el joven. Lejos de empatizar, sus amigos aprovecharon para lanzarle una seguidilla de chicanas que rápidamente se viralizó en redes sociales. “El pibe flasheó que está estudiando Actuario e Ingeniería en Petróleo al mismo tiempo”, escribió uno.
Otro bromeó: “Se toma un flat white en Starbucks antes de entrar a cursar”, haciendo alusión al estilo de vida que le atribuían. Lejos de enojarse, el estudiante se tomó todo con humor y respondió: “Jajaj para qué hablo”.
Las cargadas siguieron con más creatividad. “Su único problema es llegar de Palermo Hollywood a Puerto Madero sin que se le despeine el bigote en el Uber”, lanzó otro amigo, provocando aún más risas en el grupo.
El intercambio fue compartido en redes sociales, donde varios de los usuarios se sumaron al debate: algunos destacaron lo divertido de tener amigos así, mientras que otros defendieron al joven y señalaron la importancia de apoyar a quienes están estudiando.