Mientras el Ministro de Salud, Mario Lugones, se reunía con su par estadounidense, el antivacunas Robert Kennedy, el conflicto por las condiciones laborales y salariales en el principal hospital pediátrico de máxima complejidad del país escalaba.
En ese contexto, en una asamblea masiva, trabajadores del Hospital Garrahan definieron un paro total para el jueves 29, con marcha al Ministerio de Salud de la Nacion desde las 13hs.
“Una histórica asamblea realizada en el Aula Magna del Hospital Garrahan resolvió un paro de todo el personal para el próximo jueves 29. En ella participaron residentes y trabajadoras y trabajadores de la planta de todas las profesiones y oficios que hacen funcionar al hospital”, expresaron los trabajadores del nosocomio.
Llamativamente, mientras se difundía el resultado de esta asamblea, comenzaba a circular la declaración conjunta entre Lugones y Kennedy, donde además de justificar la salida de la OMS se afirma que “el gobierno argentino heredó un sistema de salud devastado y está logrando avances rápidos en su reconstrucción y fortalecimiento, con un renovado enfoque en la transparencia y la atención de calidad para todos los ciudadanos”.
“Los residentes ya están de paro por tiempo indeterminado porque sus salarios no cubren la línea de pobreza. El personal de planta se suma no solo por solidaridad, sino también porque padecemos la misma situación. Para dar un ejemplo, un enfermero con 10 años de antigüedad en el principal hospital pediátrico del país no llega a los 900 mil pesos”, criticó Alejandro Lipcovich, trabajador y secretario general de la Junta Interna de ATE.
A su vez, alerto que “la situación llegó a un límite dramático, porque los salarios de hambre y las malas condiciones laborales no solo nos afectan a los trabajadores y trabajadoras del Garrahan. Sufrimos un éxodo de personal, incluidos profesionales de altísima calificación, lo cual vacía las capacidades de atención de este hospital modelo”.
“Las víctimas son cientos de miles de niños y niñas, que junto a sus familias acuden a lo largo del año al Garrahan. Es evidente que Lugones y los funcionarios que nombró en el Garrahan (El Kik, Menehem, Dalmazzo y Pérez) están decididos a vaciar el hospital a cualquier costo”, agregó Lipcovich.
Gerardo Oroz, trabajador de la Farmacia y secretario adjunto, añadió: “Estamos en una lucha de fondo. Milei y Lugones no disimulan su propósito de liquidar la salud pública. Por eso, la pelea que se desarrolla en el Garrahan debe hacerse extensiva al resto del personal de salud y a la población trabajadora en general. Llamamos a la comunidad a sumarse”.




