El streaming en vivo siempre deja margen para lo inesperado. Y eso fue lo que ocurrió en una reciente emisión de Se Fue Larga, el programa de Luzu TV, cuando Domi Faena compartió una intimidad de pareja, Fermín Bo, que no solo incomodó a él, presente en el estudio, sino también a buena parte de la audiencia.
Todo comenzó cuando Faena relató una situación personal que, según sus palabras, "Hubo un día que no nos fuimos a dormir muy contentos”. Contó que, tras ver juntos la película 50 sombras de Grey, se acostaron en la cama, y mientras ella esperaba una noche de pasión, su novio, también parte del staff del programa, se puso los auriculares y se quedó viendo South Park. La revelación, inesperada, dejó al joven visiblemente incómodo. Su expresión lo dijo todo: no estaba preparado para ese nivel de exposición.
Pero eso no fue todo. Domi fue más allá: al ver que su pareja no reaccionaba, decidió autosatisfacerse por su cuenta, “me pa... delante de él”, a lo que el le pregunta ¿Qué te pasa que te moves tanto?. La confesión provocó una mezcla de carcajadas, sorpresa y silencio en el estudio. Varios compañeros del programa se pusieron de su lado: “Amigo, ¿sabés cuántos hombres quisieran estar en tu lugar?”, le dijeron entre risas. Otro acotó: “Lo que dormís”.
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— Giuliana (@mr1947391) May 31, 2025
Que opinan de esto ?
En mío opinión tuve una pareja que hizo eso cuando recién lo estaba conociendo y me sentí horrible y siento que ferbo nunca lo diría para que no la bardeen ! Es una falta de respeto pic.twitter.com/2gwtUeei9g
Sin embargo, no todos se tomaron el momento con ligereza. Fermín, protagonista de esta situación, expresó su incomodidad: “Soy muy respetuoso, no puedo creer lo que estoy escuchando”. La reacción de él pareció representar a una parte de la audiencia que también se sintió descolocada.
El momento se volvió viral y desató una lluvia de comentarios en redes sociales. Mientras algunos bancaron el relato de Domi como algo natural dentro de una pareja, otros criticaron duramente la exposición pública. “Me parece un montón que exponga de esa manera una intimidad de su pareja, en un streaming, y encima tiene el tupé de boludearlo. Todo es un montón”, escribió un usuario en X. Otro planteó: “Lo quieren hacer quedar mal a él cuando ella es UNA ADULTA que, si quiere sexo, podría COMUNICÁRSELO a su pareja… ¿NO?”.
El episodio volvió a poner sobre la mesa el debate sobre los límites entre lo íntimo y lo público en los medios digitales. ¿Todo vale por contenido? ¿Hasta dónde se puede exponer a la pareja sin su consentimiento explícito? Y sobre todo: ¿el humor justifica todo en el juego de la exposición?
Las respuestas, como siempre, dividen aguas. Pero lo cierto es que esta escena de cama, o de streaming, seguirá dando qué hablar.
