
A 18 años de la desaparición de Madeleine McCann, el caso vuelve a estar en el centro de la escena internacional. En las últimas horas, autoridades de Portugal y Alemania lanzaron un nuevo operativo de búsqueda en el sur del país luso, en las cercanías del lugar donde la niña fue vista por última vez el 3 de mayo de 2007.
Es precioso mencionar que, Madeleine tenía tres años cuando desapareció de un complejo de apartamentos en Praia da Luz, en la región del Algarve, mientras vacacionaba con su familia. Su caso conmocionó al mundo entero y se convirtió en una de las búsquedas más mediáticas y extensas de los últimos años.
Según confirmaron fuentes oficiales, la nueva búsqueda se desarrolla en el municipio de Lagos, a unos 5,6 kilómetros del sitio original de la desaparición. La policía portuguesa actúa bajo una serie de órdenes judiciales emitidas por la fiscalía alemana, que solicitó intervenir en 21 terrenos diferentes.
Este martes por la mañana, un camión de bomberos y varios vehículos de la policía alemana llegaron a la zona. Las vías de acceso, cubiertas por matorrales, permanecen cerradas desde el inicio del operativo, y se instaló una gran carpa azul como base central de trabajo. La operación se extenderá hasta el viernes 6 de junio e incluye la participación de unos 30 agentes alemanes.
La reactivación del caso tiene como contexto el avance de la investigación contra Christian Brückner, un ciudadano alemán de 48 años, identificado como el principal sospechoso desde 2020. Actualmente cumple condena en Alemania por la violación de una turista estadounidense de 72 años en Portugal en 2005.
Aunque su liberación estaba prevista para septiembre de este año, podría posponerse hasta 2026 si no paga la multa correspondiente a su sentencia. Las autoridades alemanas temen que, de no imputarlo formalmente por el caso McCann, Brückner quede en libertad y se fugue.
El mundo sigue atento a este nuevo capítulo en uno de los casos de desaparición más impactantes de la historia reciente.