
Desde hace varios días, vecinos y transeúntes que circulan por la calle 46 entre 12 y 13 vienen denunciando una pérdida constante de agua que impide el uso seguro de las rampas. La situación fue señalada especialmente por adultos mayores y usuarios de sillas de ruedas, que deben desviarse para poder cruzar.
El agua se acumula alrededor de las rampas de la esquina de calle 12, y de la esquina de calle 13, formando un charco que, además de dificultar el acceso, genera riesgo de resbalones. “Hay momentos en los que es imposible usarla sin mojarse los pies”, señaló un vecino de la cuadra.
Según relatan los habitantes de la zona, la pérdida persiste desde hace varios días y ningún operario se acercó a la zona para inspeccionar o realizar reparaciones. La preocupación aumenta con el mal tiempo, ya que la acumulación de agua se agrava y representa un peligro aún mayor para quienes dependen de la rampa.