Una vecina de Ringuelet iba caminando por una vereda a la altura de 6 y 517, pisó una tapa de registro que se le dio vuelta y termino en el piso con parte del cuerpo dentro.
"Íbamos caminando con mi hermana y de repente me fui para abajo al dar con un pozo. Quedé sostenida con la punta de los dedos. Mi hermana me ayudó a salir, pero si no estaba ella me caía al vacío porque era imposible sostenerse", comento la vecina en dialogo con El Día.
En ese sentido, sostuvo: “No me maté de casualidad". "Luego vino mi cuñado a rescatarme", rememoró la vecina.
Por otro lado comento que el poso no tenía tope, “los chicos que se acercaron y la gente de la ambulancia soltaron un alambre para medir la profundidad pero no encontraron tope”.
“Era como un pozo ciego, bien profundo. De haberme caído no hubiese tenido chances de sobrevivir", agregó.