En los últimos días, una historia tan insólita como encantadora conmovió a los usuarios de Tik Tok. Una joven compartió un video contando que su perrita, Mía, había conocido en Plaza Italia a un perro llamado Batata… y que ella, a su vez, se había “enamorado” del humano que lo acompañaba.
En este marco, con algo de humor, al día siguiente subió un segundo video desde la misma plaza: “No hay rastros”, decía mientras caminaba junto a Mía, visiblemente decidida a encontrar al misterioso papá de Batata. “¡Batata, aparecé!”, cerró.
Es preciso mencionar que, la comunidad tiktokera no tardó en sumarse y ayudar: “Es momento de postularse, muchachos. Aún no hay jurisprudencia que nos obligue a pagar cuota alimentaria canina”, bromeó un usuario. Otro deslizó: “El papá de Batata tiene miedo y está escondido después del video viral”.
@cmaiteee @Lourdes #batata #acoso #plazaitalia #laplata #amor #a #fyp?? #paratiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii ? Mission Impossible - Adam Clayton
Pero lo inesperado ocurrió: el papá de Batata apareció en Tik Tok y comentó directamente: “Hoy voy a la plaza”, dando una señal clara de que también tenía ganas de reencontrarse. Las respuestas no se hicieron esperar. “¡Necesito ver ese encuentro con la piba que te anda buscando!”, comentó una joven. Y otra, emocionada, celebró: “¡Apareció el papá de Batata!”.
@joaquinlisa #fyp#batata#plazaitalia#parati ? sonido original - Ig:joacolisa_
Por ahora, no se sabe cómo continuará esta historia. Pero algo quedó claro: entre perros, plazas y algoritmos, el amor puede surgir donde menos se lo espera.