Este lunes, la Justicia imputó a los dueños de los perros que atacaron y mataron a un niño de 2 años en un descampado de la localidad platense de Arturo Seguí. El trágico episodio ocurrió el domingo por la tarde, luego de que el menor se alejara de su casa y fuera hallado sin vida en una plantación.
Todo comenzó este domingo alrededor de las 16:00, cuando la madre del menor, Rosa Dávila Mayon dejó al pequeño al cuidado de su abuela y sus hermanos mayores, de 12 y 14 años. Al regresar cerca de las 18:00, descubrió que su hijo no estaba y comenzó una desesperada búsqueda.
Se desplegó entonces un amplio operativo policial que incluyó efectivos de la Comisaría 7ª de Abasto y otras dependencias de la Estación de Policía Departamental de Seguridad (EPDS) La Plata, quienes rastrillaron la zona, un extenso campo con quintas y plantaciones, durante varias horas.
Finalmente, a unos 150 metros de la vivienda familiar, el cuerpo del niño fue hallado entre una plantación de berenjenas. El hallazgo fue realizado por policías de la seccional local. De acuerdo con las primeras observaciones, el cuerpo estaba desnudo, con múltiples lesiones compatibles con mordeduras de perro, y los restos de su ropa, incluido un pañal, estaban desgarrados y esparcidos a lo largo del terreno.
Se presume que el cuerpo fue arrastrado cerca de 50 metros por los animales. Una ambulancia del SAME acudió al lugar y constató el fallecimiento del menor. La Fiscalía N° 16 de La Plata dispuso la realización de pericias forenses y caratuló la causa como “Averiguación de causales de muerte”.
En las últimas horas, el fiscal Juan Cruz Condomí Alcorta notificó la imputación a una pareja vecina de la familia, que posee cuatro perros, tres de ellos de raza pitbull o cruza. Los animales viven en inmediaciones de la casa de la víctima, y los investigadores presumen que al menos tres de ellos podrían estar involucrados en el ataque mortal.
Uno de los canes, que no presentaría rastros compatibles con el ataque, también será sometido a peritajes veterinarios. Se analizarán muestras biológicas y comparaciones dentales para establecer si las mordeduras corresponden efectivamente a estos animales.
Los perros fueron retenidos por las autoridades, y se evalúa si el accionar de los propietarios encuadra en alguna figura penal por negligencia o imprudencia en la tenencia de animales peligrosos.
Por ahora, no hay personas detenidas, pero los imputados deberán rendir cuentas ante la Justicia. Mientras tanto, la comunidad de Arturo Seguí permanece conmocionada por la tragedia, y la familia del niño atraviesa horas de profundo dolor.