El caso de Pablo Ghisoni, el médico obstetra que estuvo preso durante tres años por una denuncia de abuso sexual que realizó su propio hijo, volvió a generar conmoción pública luego de que Tomás Ghisoni grabara un video confesando que la acusación fue falsa.
“No fui abusado. Fui usado”, afirmó Tomás, quien señala como principal responsable a su madre, la médica Andrea Vázquez. Según relató, la denuncia fue inducida por ella cuando él era aún un adolescente.
En una entrevista con La Nación+, Tomás y su hermano Francisco contaron el calvario que atravesaron durante más de una década. Tomás aseguró que su madre “eliminó” a todos aquellos que no compartían su postura, incluso a él mismo: “Pasé a ser su enemigo, por eso busca desacreditarme. Así lo hizo con sus padres y con su hermana”.
Qué tremendo ser víctima de tu propia madre, y lo peor es que el sistema no lo detectó. Las pericias, en muchos casos, las hacen profesionales con prejuicios y sesgos y eso lleva, inevitablemente, a destruir familias y personas que llegan incluso al suicidio. Hay que peritar con… pic.twitter.com/PwAUxycxGH
— Rosario Agostini (@peponila) July 24, 2025
“La convivencia que tuve con mi mamá durante el tiempo que viví con ella me hizo dar cuenta de que había ciertas actitudes que no eran del todo normales. Había conductas muy manipuladoras”, expresó.
Asimismo, reveló que su madre acusó a su propio padre, el abuelo de Tomás, de abuso sexual. “Lo más doloroso es que yo la amo y la entiendo como una persona que tiene un problema mental. Hasta creo que ella se convenció de lo que ella misma creó”, concluyó.
El caso, que vuelve a estar en el centro de la escena pública, plantea profundas preguntas sobre las consecuencias de las denuncias falsas, la manipulación familiar y los vacíos del sistema judicial.
