El domingo pasado se produjo un trágico accidente en la localidad de Los Hornos que terminó con la vida de dos hombres que huían de un control policial. El siniestro tuvo lugar tras una persecución que comenzó en las calles 143 y 66 y culminó cuando la motocicleta en la que viajaban colisionó violentamente contra una columna en la intersección con la calle 60.
Ese mismo día se confirmó el fallecimiento de Charly Enrique Maidana, de 35 años, mientras que ayer se informó la muerte de Gabriel Nicolás Franco, de 29, ambos como consecuencia del fuerte impacto.
Las autoridades investigan si antes del inicio de la persecución los involucrados habían participado en algún delito. En el caso de Franco, se indicó que tenía antecedentes penales y había estado detenido en la Unidad Penitenciaria de Lisandro Olmos.
Tras conocerse el fallecimiento de ambos motociclistas, familiares, amigos y allegados se expresaron con profundo dolor en las redes sociales, pidiendo también ayuda económica para costear los gastos del velorio.
Una familiar de Maidana lo recordó con cariño, “el tipo más bueno que conocí, siempre con una sonrisa, buen hijo, buen hermano, amigo ejemplar y un gran padre”.
La difusión del caso en redes y medios generó reacciones por parte de allegados a las víctimas. Una mujer cuestionó con indignación que se haya etiquetado a Maidana como “motochorro”, “estoy leyendo muchas cosas que no son ciertas. Mi primo no era un delincuente. Siempre trabajó, cuidaba de sus hijos y era una buena persona. Pedimos respeto para la familia”.
La conmoción entre vecinos y seres queridos fue evidente, “la gente habla sin conocer. Charly fue una gran persona, hijo de una familia muy querida en el barrio”.
Respecto a Franco, desde su entorno también subrayaron su esfuerzo diario, “era uno de tantos pibes que luchan todos los días para salir adelante con su familia. Tenía tres hijas, trabajaba, y su vida se apagó por una persecución injusta”.