La Fundación Argentina de Ovnilogía (FAO), creada en La Plata hace 40 años, advierte que podríamos estar ante el fin de la era de los objetos voladores no identificados. Esta histórica organización, que reúne y analiza más de 6.000 casos desde 1947, estima que solo unos 200 podrán sostenerse tras un riguroso estudio científico.
El primer avistaje registrado en el país ocurrió justamente en La Plata, en 1947, y desde entonces la región se convirtió en un epicentro para el fenómeno OVNI. La FAO nació en 1984, con investigadores de todo el país, muchos de ellos vinculados al Grupo Estudiantil Investigador de OVNI (GEIDOVNI) fundado en Ensenada en los 70.
Luis Burgos, presidente y fundador de la FAO, explica que el fenómeno ha cambiado y aunque no desapareció, hay menos evidencia sólida. Desde la organización, aclaran que su objetivo no es probar la existencia de extraterrestres, sino estudiar fenómenos anómalos que podrían tener explicaciones como tecnología avanzada terrestre o dimensiones paralelas.
A lo largo de su historia, la FAO enfrentó el escepticismo social y buscó sin éxito reconocimiento oficial, pero nunca dejó de investigar y organizar vigilias para observar el cielo en busca de señales.
Hoy, la fundación continúa activa, integrando a nuevos investigadores junto a sus fundadores, y mantiene viva la tradición platense como la cuna argentina de la ovnilogía.
El primer avistaje de ovnis en La Plata, ocurrió el 10 de julio de 1947 en la esquina de 25 y 56, donde un grupo de vecinos observó un objeto esférico y violáceo.
Otro avistamiento sucedió en calle 518 entre 4 y 5 el 26 de noviembre 1974, una familia se encontraba viendo una telenovela cuando escucharon un ruido fuerte e inmediatamente la sala se iluminó con una luz plateada que ingresó por la ventana.
Es por eso que la ciudad de La Plata cuenta con una asombrosa historia de ovnis en Parque San Martín, en la famosa “Zona 72” y en Ringuelet.