El caso que sacudió a la comunidad educativa de La Plata sumó un nuevo y polémico capítulo. Verónica Dalmasso, la docente del Jardín Nuestra Señora de Fátima acusada de maltratar gravemente a niños de entre 3 y 4 años, no se presentó a una audiencia fundamental en el Juzgado Correccional N° 2, en el marco de la causa por “lesiones graves” que enfrenta desde hace años.
La incomparecencia de Dalmasso, cuya presencia era vital en esta etapa previa al juicio oral, causó una fuerte indignación entre los padres de las presuntas víctimas. Desde 2019, las familias exigen justicia tras escuchar de boca de sus hijos relatos estremecedores sobre lo que habría ocurrido dentro de las aulas.
El caso tomó estado público luego de que se viralizara un audio por WhatsApp, donde una nena de apenas 4 años describía cómo había sido atada de pies y manos con cinta adhesiva “para que se quedara calladita”. Según el testimonio, los castigos eran frecuentes y solo se interrumpían cuando otra maestra intervenía.
Pese a que en un principio la causa fue archivada, la presión constante de los padres logró que se reabriera. El fiscal Martín Almirón, a cargo de la UFIJ N° 8 de La Plata, recolectó pruebas médicas que confirmaban lesiones compatibles con ataduras y solicitó la elevación a juicio. El juez de Garantías Agustín Crispo avaló el pedido.
Desde el jardín, ubicado en calles 75 y 22 de Altos de San Lorenzo, siempre defendieron a la docente, alegando que no había pruebas concluyentes. Sin embargo, reconocieron que los testimonios de los menores no podían ser descartados tan fácilmente. Dalmasso, quien cuenta con 22 años de trayectoria en la institución, está ahora en el centro de una investigación que dividió a toda una comunidad escolar y dejó marcas difíciles de borrar en decenas de familias.