A falta de dos ensayos todo hace indicar que el único interrogante que mantiene por estas horas el cuerpo técnico albiazul para disputar la octava fecha del Torneo Clausura es saber quien será el acompañante en la ofensiva de Marcelo Torres y en ese sentido las alternativas son la vuelta de Marcelo Briasco o la continuidad del venezolano Jan Hurtado.
Según le confirmaron a LAPLATA1.com el ex Huracán, no formó parte del amistoso ante Racing por precaución, en el inicio de la semana se sumó a trabajar con normalidad junto a sus compañeros y de continuar con la evolución que viene mostrando se perfila para iniciar en el XI del Lobo.
Recordemos que el atacante estuvo a punto de rescindir su contrato con Gimnasia pero con el arribo de Alejandro Orfila su realidad cambió drásticamente y tras ser suplente en la primera fecha ingresó de titular en la segunda jornada y recién dejó el equipo por una lesión muscular en la antesala al choque con San Martín de San Juan que también lo sacó de la consideración del compromiso frente a Atlético Tucumán.
La otra opción es que siga Hurtado a quien se lo notó falto de ritmo futbolístico producto de la larga recuperación que le generó el desgarro que sufrió en la previa al comienzo del Clausura. De hecho Orfila le volvió a dar minutos en el encuentro amistoso desarrollado en Avellaneda.
Otro de los temas que se instaló en la agenda tripera es la situación de Juan Yangali, una de las tantas apuestas deportivas que arribaron a Gimnasia, que desde que se sumó aún no debutó. Sobre cinco presentaciones solo fue llamado ante Lanús y por lo que le confiaron a este portal al mediocampista central le está costando el cambio de categoría (venía de jugar con San Telmo la B Nacional) y la intención es ir llevándolo progresivamente.
Una de las zonas más cuestionadas dentro del equipo del Lobo es el mediocampo y muchas críticas han recaído en la dupla conformada por Garayalde y Seoane ante la falta por momentos de marca y de agresividad. Sin embargo ambos cuentan con el respaldo del cuerpo técnico que en el corto plazo no analiza reemplazarlos, salvo que se lesionen o sean suspendidos, por jugadores de otra características. Orfila y sus colaboradores apuntan desde que llegaron a potenciar el plantel que heredaron y que sea un equipo inteligente.