En 13 y 53 se encuentra Plaza Moreno, en el verdadero corazón de La Plata, donde sobresale la imponente Catedral y el Palacio Municipal. Ahí suele mencionarse una historia que sorprende a quienes visitan la ciudad: la del “Obelisco Inexistente”.
Según cuenta la leyenda, en los planos originales de la ciudad estaba previsto construir un obelisco como hito central. La idea buscaba replicar, en cierto modo, lo que representa el Obelisco de Buenos Aires, convirtiéndolo en un símbolo identitario de la capital provincial. Sin embargo, ese proyecto nunca llegó a concretarse.
Con el paso del tiempo, la ausencia del monumento dio origen a un mito urbano que sostiene que el obelisco existe “invisiblemente”. Se trataría de un símbolo oculto, intangible, pero presente en la memoria y el imaginario colectivo de la ciudad.
La historia se vincula además con el aura de misterio que rodea a La Plata desde su fundación. Su trazado geométrico, las historias sobre túneles subterráneos y la influencia masónica han alimentado durante décadas relatos cargados de misticismo. En ese contexto, el obelisco ausente se convirtió en parte del folklore local.
Lo cierto es que en Plaza Moreno nunca se levantó un obelisco ni hay constancia de que existiera un plan oficial para hacerlo. De hecho, el único obelisco de la ciudad se encuentra en las inmediaciones de la Plaza San Martín, inaugurado en 1932 en homenaje a los ingenieros que participaron en la construcción de La Plata.

Sin embargo, el mito sigue vivo y muchos turistas se sorprenden al escuchar la historia durante los recorridos guiados por el casco histórico y no falta quien posa para una foto “con el obelisco invisible” de fondo, justo en el centro geométrico de la ciudad.
El “Obelisco Inexistente” es, en definitiva, un ejemplo más de cómo las leyendas urbanas pueden moldear la identidad de un lugar y aunque nunca fue construido, su presencia simbólica sigue alimentando las leyendas de la ciudad.





