Un tenso momento se vivió en el barrio de Villa Elisa cuando un bebé de un año llegó en una emergencia a la comisaría de esa localidad con signos de ahogamiento. Afortunadamente, pudo superar la situación gracias a la maniobra que le practicó una agente que se encontraba de servicio.
Todo empezó cuando su madre, de 22 años, notó que el menor tenía dificultades para respirar y, ante la urgencia, decidió acercarse al departamento policial.
Una vez allí, los efectivos respondieron a su pedido de ayuda y una agente, identificada como Macarena Sosa, no dudó en intervenir.
Fue entonces que le practicó una maniobra que hizo que el bebé mejore su capacidad respiratoria y se pueda mitigar la urgencia. Asimismo, rápidamente la trasladaron al Hospital de Gonnet para que reciba la atención correspondiente por un cuerpo médico.
En el nosocomio evaluaron su estado de salud y confirmaron que la víctima ya se encontraba fuera de peligro.
Sin embargo, le diagnosticaron un cuadro febril y decidieron mantenerlo internado y en observación para estudiar su evolución, debido a la corta edad del paciente.