El cuerpo técnico albirrojo tomó la determinación de afrontar la novena fecha del Torneo Clausura con una formación plenamente alternativa tendiendo en cuenta la proximidad del choque con Flamengo de Brasil y la relevancia de ese partido que lo puede depositar en las semifinales de la Copa Libertadores.
En ese contexto en la formación ante Defensa y Justicia aparecieron los juveniles Magdaleno y Desábato, que ya habían sido parte de la delegación que viajó a Río de Janeiro pero no tuvieron la chance de hacer su estreno. Sin embargo ante la lesión de Eric Meza sumado a que fue preservado Román Gómez el lateral derecho, de apenas 18 años, fue elegido para jugar arranque en UNO y luego del triunfo confesó que la antesala al partido lo atravesó "muy ansioso y con muchas ganas que llegara ese momento, tratando de transitar con tranquilidad las horas y los días previos. Es muy complicado manejar la ansiedad y no volverse loco."
El defensor, categoría 2007, admitió que "me apoyé mucho en mis compañeros, en el cuerpo técnico y en la gente que me rodea y la pude pasar muy bien. Jugar profesionalmente es el sueño de todos y la verdad hacerlo en UNO es una locura. Estoy muy contento y a disfrutar". Además Magdaleno se lamentó debido a que "mi familia justo no puedo venir por cuestiones personales y eso me da un poquito de lástima pero igual estoy recontra acompañado"
En el final del contacto que mantuvo con la prensa llenó de elogios a su compañero de reserva Máximo Desábato que también hizo su estreno en primera división y sentenció: "lo vi más tranquilo a él que a mi. La rompió toda y encima es buena gente".
El hijo del histórico ex defensor del Pincha y flamante integrante del cuerpo técnico de Gustavo Quinteros en Independiente también habló tras cumplir el sueño de jugar en primera división y confesó que "si lo pensaba de otra manera no había chances de que pase pero así es el fútbol y las oportunidades se dan y lo importante es saber aprovecharlas y estar preparados para eso."
Tras el pitazo final del árbitro Sebastián Martínez Beligoy Máximo Desábato reveló que fue "una sensación única que pocas veces la voy a vivir porque un debut en casa con tu gente, ganando y jugando bien". Y dejó en claro que "me sentí muy bien, me acompañaron muy bien los compañeros y fue una linda noche" y reconoció que en la previa su papá Leandro "me aconsejó pero no mucho, quería que lo disfrute y no estar tan encima porque que estaba preparado."




