El concejal platense Darío Ganduglia, del espacio Propuesta Vecinal, presentó un proyecto en el Concejo Deliberante de La Plata en el que solicita al Departamento Ejecutivo que recupere y reactive las casetas de seguridad instaladas en plazas, parques y espacios públicos de la ciudad, las cuales, según denunció, hoy se encuentran “cerradas, abandonadas o usadas como depósitos”.
La iniciativa fue ingresada durante la sesión ordinaria de este jueves y pasó a la Comisión de Seguridad para su análisis. Ganduglia, quien fue secretario de Seguridad durante la gestión de Julio Garro, apuntó directamente contra la actual administración de Julio Alak, al señalar que tras su asunción, muchas de estas estructuras quedaron fuera de funcionamiento o fueron desmontadas.
Hasta julio de 2023, la gestión anterior había instalado 18 casetas de prevención y había anunciado la construcción de al menos seis más, incluyendo nuevas ubicaciones como Plaza Malvinas (19 y 51) y Plaza Yrigoyen (19 y 60). Estos puestos funcionaban con presencia las 24 horas, personal de Guardia Urbana, y estaban conectados con el Centro de Operaciones y Monitoreo (COM) y el sistema de emergencias 911.

“Hoy traemos una preocupación concreta pero también simbólica sobre el estado de las casetas. Eran espacios de referencia, de cercanía, donde el vecino podía denunciar o simplemente sentirse acompañado por el Estado”, expresó Ganduglia durante su intervención.
Además, subrayó que estos puntos de vigilancia eran parte de una política integral de seguridad: “La decisión era no limitar la seguridad a un patrullaje esporádico, sino acercarla a la vida cotidiana de los platenses. La mayoría de las casetas contaban con tecnología, comunicación directa y personal capacitado”.
El concejal lamentó el estado actual de estos espacios, al sostener que “hoy están cerradas, sin funcionamiento y en muchos casos se usan como depósitos”. Y advirtió: “La seguridad no se construye sólo con cámaras. El vecino necesita ver al Estado en el barrio. Cuando las casetas desaparecen, el mensaje es claro: la seguridad dejó de ser una prioridad”.





