La actriz Florencia Peña denunció públicamente que fue amenazada por el influencer libertario “@elpittttt”, quien además habría inventado una conversación privada con ella. Pero el dato más explosivo lo sumó en el mismo tuit: según Peña, el agresor es un “troll pago del Estado” con múltiples ingresos a la Casa Rosada. “¿Opera… con la nuestra?”, escribió, apuntando directamente a un entramado de militancia digital financiada con fondos públicos.
La denuncia de Peña no es aislada. Una investigación de LA NACION reveló que varios influencers libertarios, entre ellos “ElPelucaMilei”, “El Sagaz”, “El Pittttt”, “El Pasante” y otros, figuran como empleados en distintos organismos estatales. Entre los empleadores aparecen el INCAA, la Cámara de Diputados bonaerense, la Secretaría General de Presidencia y otras dependencias públicas.
Aunque no todos tienen contratos permanentes, registros oficiales muestran que durante meses recibieron aportes patronales del Estado, incluso mientras participaban activamente en la gestión, autorizando ingresos a Casa Rosada o formando parte de reuniones con funcionarios clave como Santiago Caputo.
Tomás Jurado (“ElPelucaMilei”) trabajó para la Secretaría General de Presidencia. Pedro Lantaron (“@elpittttt”) fue empleado del INCAA y asesor en la Legislatura bonaerense. Lucas Luna (“El Sagaz”) fue parte del equipo de Romo y Caputo. Todos tienen múltiples ingresos registrados en la sede presidencial.
Acá les dejo datita de @elpittttt, quien me está amenazando e INVENTANDO una conversación privada conmigo.
— Florencia Peña (@Flor_de_P) September 27, 2025
Opa! Resulta que es un troll pago del Estado, que además sí tiene varios ingresos en la Casa Rosada. Opera… ¿CON LA NUESTRA?
Fuente: Diario La Nación… pic.twitter.com/NxJpWOXhTm
Lo que era una “batalla cultural” libertaria impulsada desde redes, toma ahora otra dimensión, se trata de un esquema donde influencers, que muchas veces hostigan, desinforman o escrachan a figuras opositoras, son financiados, directa o indirectamente, por el Estado.
La pregunta que planteó Flor Peña, con crudeza pero precisión, sigue flotando: ¿con qué recursos opera esta estructura digital oficialista? Y sobre todo, ¿por qué hay trolls con sueldo estatal autorizando ingresos a la Casa Rosada?




