A partir de octubre, los colegios privados con aporte estatal en la provincia de Buenos Aires ajustarán sus cuotas un 2,8%, de acuerdo con lo autorizado por la Dirección General de Cultura y Educación provincial. Esta medida, consensuada con la Asociación de Institutos de Enseñanza Privada de la República Argentina (AIEPBA), busca acompañar los aumentos salariales acordados con los gremios docentes y garantizar el sostenimiento del sistema educativo privado en la provincia.
En este contexto, se conoció el caso del Colegio Divina Providencia, ubicado en Villa Elisa y dependiente del Arzobispado de La Plata, donde las familias manifestaron su profunda preocupación por el incremento de la cuota mensual, que pasará de $158.000 a $200.000 en 2025, además de una matrícula anual de $180.000. Este aumento representa una suba de más del 26% en la cuota y un fuerte impacto económico para los hogares.
Según los valores oficiales dispuestos por la provincia, los topes de cuotas para escuelas con subvención estatal en el nivel secundario oscilan entre $33.060 (para instituciones con 100% de aporte) y $176.100 (para aquellas con 40% de subsidio). El valor anunciado por el Divina Providencia supera incluso el arancel máximo permitido.
Desde la comunidad educativa se informó que el colegio inició hace dos años un trámite ante la Dirección de Gestión Privada (DIEGEP) para acceder a un subsidio estatal que cubra entre el 40% y el 100% de los sueldos docentes, pero hasta el momento no ha recibido una respuesta definitiva. En caso de obtener el aporte, debería adecuar sus aranceles a los límites oficiales establecidos por el gobierno bonaerense.
Frente a esta situación, un grupo de madres comenzó a organizarse para exigir la intervención del Estado y solicitar una solución que permita sostener la matrícula y evitar el posible cierre del nivel secundario por la imposibilidad de muchas familias de continuar pagando. “Nuestros hijos están desde jardín en este colegio, es muy angustiante pensar en sacarlos ahora”, expresó una madre en diálogo con la prensa local.
Mientras tanto, las autoridades provinciales insisten en que el esquema actual de aumentos busca brindar previsibilidad y equilibrio, tanto a las instituciones como a las familias. Sin embargo, el caso del Colegio Divina Providencia evidencia que la falta de definición en el acceso a subsidios puede dejar a muchas escuelas fuera del marco tarifario oficial, trasladando los costos directamente a los padres y poniendo en riesgo la continuidad educativa de cientos de alumnos.